¿Cuándo deberías ducharte antes del sexo anal?
Las duchas anales no son un proceso complejo en absoluto, aunque a veces uno puede preguntarse si es necesario realizarlas. La pregunta que siempre desconcierta a muchas personas suele ser si deberían hacer esto antes, cada vez que tienen relaciones sexuales, ocasionalmente o solo a veces. Espero que este artículo le aclare las cosas.
Ducharse antes del sexo
La razón principal por la que se realizan duchas anales antes de realizar cualquier sexo anal es porque es necesario limpiar el recto y prepararlo para lo que está por venir. En resumen, esto quiere decir que las duchas anales deben realizarse cuando uno espera tener sexo anal o juego anal. Sin embargo, no es tan simple como parece. Las duchas anales tienen una función muy similar a los enemas de ducha. Ambos pueden usarse por placer y por higiene.
Hay personas que se duchan diariamente como parte de su rutina normal. Para ese tipo de personas, las duchas anales son normales, ya que uno se ducharía a diario. Hay quienes se duchan ocasionalmente, lo que podría ser una vez a la semana o después de algunas semanas. Hay otras personas que se duchan antes del sexo anal, lo que podría ser antes de salir por la noche o incluso de una cita. No existe una regla específica sobre el número de veces o la frecuencia con la que uno puede ducharse, aunque es importante prestar siempre atención a su propio cuerpo, ya que puede saber fácilmente cuándo se está excediendo.
¿Cuánto es demasiado?
A decir verdad, todavía no existe una regla definida sobre cuánto es demasiado. En caso de que se realice una ducha vaginal a diario, existe la posibilidad de que esto provoque daños en el recto. Si también te duchas continuamente, es probable que las paredes rectales se sequen, lo que puede causar mucho dolor al practicar sexo anal y esto eventualmente provocaría desgarros o desgarros. Esto también puede provocar un desequilibrio de los electrolitos que provoque la eliminación gradual de la flora intestinal natural y de otras bacterias.
En ese caso, si no es a diario, ¿con qué frecuencia se debe hacer? Personalmente, le recomendaría que haga esto sólo un par de veces al mes. Esto le dará a su cuerpo el tiempo adecuado para recuperarse entre las diferentes sesiones. Esto se puede espaciar de la forma que elija y se puede hacer con regularidad o justo antes de un evento específico.
Si no puedo hacerlo todo el tiempo, ¿para qué molestarme?
¡Esto se reduce a lo que quieres! En caso de que usted y su pareja estén de acuerdo con un desorden fecal hasta cierto punto durante el sexo anal, entonces no es tan necesario realizar una ducha vaginal. En caso de que esto sea algo que termine preocupándote, deberías considerar la posibilidad de realizar una ducha vaginal justo antes de practicar cualquier sexo anal o jugar con juguetes sexuales .
En caso de que te diviertas con esto, puedes hacerlo con tanta frecuencia como quieras. Lo más importante es prestar atención a su propio cuerpo; si, en cualquier caso, algo se siente mal, debe dejar de ducharse y permitir que su cuerpo se recupere antes de volver a ducharse.